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miércoles, 28 de noviembre de 2012

Una historia que contar...Final

Leandro se casaba y Joana no podía hacer nada, todo iba a acabarse en cuanto él diera el si quiero.
No quería que todo acabara así, todo el mundo comete errores y son perdonados tarde o temprano. Los dos estaban equivocados, no podrían dejarlo todo atrás aunque quisieran, cada mirada los delataban.
Pero eso no le impidió a Leandro casarse.

Joana aguanto la compostura durante toda la ceremonia pero no más.
Horas después Joana se fue a su habitación, minutos después todo salio ardiendo.

La habitación de Joana ardía y con ella dentro, todo estaba perdido. En un momento desesperado de intentar salvarla, Leandro entro corriendo en el cuarto, solo pudo ver la silueta de alguien junto a la ventada.
Cuando consiguieron apagar el fuego no quedaba nada reconocible entre las cenizas.

No podían creerse que la princesa hubiera muerto en tales circunstancias, no se lo explicaban.
Leandro estaba desconcertado, jamás pensó que fuera a pasar eso, la creía más fuerte... Mientras se lamentaba en el balcón una flecha le paso rozando el oído. Venia con una carta clavada, la cual decía:

Quien me acuse de cobarde no puedo decirle que no, pero no podía seguir con esa mentira ni tampoco viendo lo que sucedía y sentir la impotencia de no poder hacer nada para cambiarlo.
No podía seguir fingiendo entiéndeme, el verte feliz con otra que no era yo hacia que mi corazón se partiera en dos. Y tampoco podía mirar a Rober sin ver tu reflejo en él, sin hacer comparaciones, no se merece que le haga daño después de todo lo que ha pasado.
No le digas a nadie la verdad, necesito empezar una nueva vida desde cero, en algún lugar donde nadie sepa de mi existencia, necesito olvidarte y olvidarme de mi. 
Te deseo felicidad y que nunca nos volvamos a encontrar, no me lo tomes a mal, lo hago por mi. 
Atentamente, Joana.

Leandro arrugo el papel y lo tiro el trozo de papel al fuego, metió algunas prendas y las empaqueto. Cogió todas las monedas de oro que pudo y salio por la puerta sin mirar atrás.
Tenia que ir a buscarla y encontrarla, no se podía quedar de brazos cruzados, no pararía de buscarla hasta que no la encontrara aunque eso fuera lo último que hiciera...

Quien sabe si alguna vez se volverían a encontrar...
o si se volverían a enamorar...
si se podrían olvidar el uno del otro...
si Leandro llegaría a tiempo...
si podrían haber echo algo para cambiar lo que sucedió..

El destino es dichoso y teje hilos enredados y todo depende de si queremos seguirlo o cortarlo.


Tú eras el huracán, y yo la alta
torre que desafía su poder.
¡Tenías que estrellarte o que abatirme...!
        ¡No pudo ser!
Tú eras el océano; y yo la enhiesta
roca que firme aguarda su vaivén.
¡Tenías que romperte o que arrancarme...!
        ¡No pudo ser!
Hermosa tú, yo altivo; acostumbrados
uno a arrollar, el otro a no ceder;
la senda estrecha, inevitable el choque...
        ¡No pudo ser!





jueves, 22 de noviembre de 2012

Una historia que contar...16

+¿Leandro?
-Vete, déjame solo
+Quería ver como estabas
-Confuso
+¿Te puedo ayudar?
-Quizás
+Pues bien, habla
-¿Qué hago aquí?
+Estas encerrado
-Eso ya lo se pero ¿porque? 
+Para comprobar si lo que decía Amelia era verdad
-¿Te has casado ya?
+Bueno si y no
-¿Cómo es eso?
+¿No recuerdas nada?
-No, por eso te pregunto
+No mentía..
-¿Me lo puedes explicar?
+Si, es que ¿te acuerdas del hechicero? Pues vino a por su parte y todo cambio, yo estuve aquí encerrada, a ti te hechizo y te junto con Amelia y él se hizo pasar por mi y se caso con Rober.
-Mm, y ¿quien es Amelia?
+Tu futura esposa...
-¿Es guapa?
+Bueno si...
-¿Y cuando es la boda?
+Pasado mañana, pero yo creía que..
-¿Qué? Tu estas con tu querido Rober por eso volviste ¿no? Pues entonces yo me casare con Amelia. Cada uno por su lado y se acabo.
+Pero yo no estoy casada con él.
-Eso él no lo sabe
+Se lo puedo explicar
-No lo entenderá y seguro que os casabais de nuevo.
+No, podemos escapar.
-¿Otra vez? ¿Qué me has vuelto a envenenar?
+No, ¿porqué lo piensas?
-No se, tu sabrás el por que lo digo
+ Escapémonos, no nos encontraran 
-No Joana hay que aceptar con lo que nos a tocado.
+Jamás

Joana se acerco para besarle y Leandro le volvió la cara. Ella se fue alejando de él, poco a poco, cerró la puerta bajo llave y salió corriendo escaleras abajo.
Todo había cambiado, ya nada era igual y ella no podía seguir hacia delante.

Te lo dije estúpida
Pensé que quedaría algo
¿El que iba a quedar?
Lo que vivimos, lo que nos paso...
¿No te enteras que todo era mentira?
Solo queda una salida
No se te ocurra estúpida
Si no es él no es nadie
Está Rober...
Pero no siento nada por él
¿Y? Ya aprenderás a quererle.


sábado, 17 de noviembre de 2012

Una historia que contar...15

Se podría decir que nuestra historia ha acabado pero bicho malo nunca muere y tampoco nada es lo que parece pero todo depende de nuestra princesa la cual estaba tirada en el suelo sangrando...

-Ya todo acabo princesa. Solo queda él.
+Lo se pero déjame ami.

Y sin terminar de decir la frase se puso en pie abalanzándose contra Leandro.

#¡Para! 
*¿Amelia que haces aquí? Vete
#No, tiene que saber la verdad.
+¿Que verdad?
#Nada es lo que tu te crees yo solo soy un reflejo tuyo para él, el hechicero lo hechizo para que se sus sentimientos hacia ti se volvieran para mi. Él te sigue amando, no le mates te lo ruego. Es cierto que hay cosas que no tienen excusa pero esta si. Todas las noches es sus sueños te llevaba y en ellos te nombraba, solo tu eres dueña de él, no pude hacerle mio por mucho que lo intente.
+Estas mintiendo
#No, lo juro.
+¿Cómo puedo creerte? 
#Deja que pasen un par de horas más y el mismo te lo demostrara.
+Bien, lo haré pero si mientes...
#Os juro que no.

La misma noche una batalla dentro de Joana se batía:

Parecía arrepentido...
Exacto lo parecía, no seas idiota, te volverá a hacer daño.
Pero aun hay algo que hace que me de un vuelco el corazón cuando le veo.
Todo es imaginación tuya.
No, es algo real.
Deja ya de torturarnos, dejaste de amarle hace tiempo solo te queda odio.
Jamás podría matarlo.
Lo harás y no darás la vuelta, no nos puedes hacer esto.
¿Y si cambio? ¿Y si en realidad me ama?
Jamás lo hizo y nunca lo hará.
No lo sabes.
Si lo se.
No y punto. ¡Cállate ya!
Si tu te equivocas yo también lo hago y eso no lo permitiré.


Y el silencio llego, las voces cesaron y la joven princesa salió corriendo.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Una historia que contar...14

+¿Sabes que vas a tener de mi a partir de ahora? Un sencillo recuerdo porque no vas a volver a saber de mi nunca.
-Venga Joana déjale, podemos hablar tranquilamente. Sueltale 
*Se que te hice daño al dejarte marchar, al ignorarte, al engañarte, pero podemos hablar, no tienes porque ponerte así.
+Tengo todos el derecho y motivos del mundo para ello. ¿Sabes como mi corazón se iba haciendo pedazos con cada silencio tuyo? ¿Sabes lo mal que me sentía cuando pensaba que a mi lado no estarías  Solo te guardo odio y todo por tu asqueroso orgullo porque no es otra cosa. ¿Enserio crees que me merecía todo lo que me has hecho? ¿Tan mala fui? ¿Qué más querías de mi? 
Yo no le encontré respuestas a tales preguntas a lo que tu tampoco me diste porque me hacías el vació.
No sabes cuanto te llore, ni cuanto esperaba que volvieras y me sacaras de este poco sin fin. Pero estabas muy ocupado con otras doncellas y yo no te significaba nada. Me di cuenta demasiado tarde. Jamás tuviste que venir a consolarme esa noche, jamás tuvo que haber pasado nada.
*Lo siento.
+¿De que me vale? Ya no quiere nada, solo olvidarte, olvidar el pasado y arreglar el presente.
-Joana sueltale ya 
+No, si me matas él vendrá conmigo
-Dos pájaros de un tiro
+¿Segura?

Antes de que Joana pudiera contarle el cuello este se aparto y el guardia de la puerta le lanzo una daga al corazón de Joana.
Leandro la fue depositando poco a poco en el suelo empapándose de su sangre.

* Perdóname
+No, quien me tiene que perdonar eres tu, me cegaba el odio.
*No hables, aguanta.
-Hay tonta jovencita, ¿pensabas que te ibas a salir con la tuya? Estúpida.

Cada vez brotaba más sangre de la herida, la cual antes de ser abierta, ya sangraba. No todas las heridas se causan con las manos, también con los hechos.
Y como un hecho vale más que mil palabras, el soldado le atravesó el corazón al hechicero, le golpeo la corva para que cayera al suelo y sujetando con una mano los cabellos de este, con la otra desenvaino la espada y le corto la cabeza.

domingo, 11 de noviembre de 2012

Una historia que contar...13

El hechicero le llevo lo que Joana le había pedido. El seguía preocupado por lo del brebaje y por la locura de Joana, así que decidió que Leandro le acompañara y así Joana le vería y volvería a estar bien.

-Querida mira a quien te traje
+¿A quién?
*Hola
+Leandro..
-Si querida al amor de tu vida
+¿Al amor de mi vida? Sera al tipo que me la arruino
-No, no ¿porqué lo piensas?
+Mira donde estoy
*Estas bella
+¡ Cállate!
-Os dejare solos, portaros bien.
+¿Qué haces aquí?
*Pues acudir a la cita.
+¿Qué cita?
*Anda ya tonta, ven.
+ Aléjate de mi o te mato.
*¿Porqué estas así?
+¿Enserio me preguntas porqué? ¿No lo ves o que te pasa?
*Bueno no es un palacio pero aquí es donde tu has querido venir.
+Eres lo que no hay, estoy aquí metida por tu culpa.
*No te entiendo, ven siéntate y tranquilízate
+Hechicero ven.
-¿Qué sucede querida?
+¿Qué es lo que tramas? ¿Porqué le has traído?
-Para que todo vuelva a su sitio.
+No entiendo.
-Tienes que volver a enamorarte de él.
+¿Qué ganas con eso?
-Terminar mis planes y tu seras libre.
+¿ Cómo se que es verdad?
-Te lo prometo.
+Eso y nada es lo mismo
-Esta vez es verdad
+¿Tanto ansias el poder?
-Cuando se prueba, solo quieres más
+Una cosa, ¿qué harás con Rober?
-No te interesa
+Si me interesa. Si no me lo dices no hay trato.
-Morirá.
+¿Cuándo? 
-Haces muchas preguntas
+¿Cuándo?
-Después de la boda de Leandro.
+¿Y porque Leandro esta de esa forma?
-Bueno, quizás este algo hechizado. Le tenía que tener a raya y fuera de mis cosas.
+Así que lo de la boda es cosa tuya o ¿me equivoco?
-Exacto, tan complicado no era.

El hechicero tenía un cuchillo en el cinto y Joana se dio cuenta de ello y con un movimiento rápido se lo quito y agarro a Leandro.

*¿Qué estas haciendo?
+Una vida por otra, fácil 
-Joana, tranquila.
+Él me la robo, yo haré lo mismo


Una historia que contar...12

La princesa no paraba de pensar si realmente valía dar la vida por alguien que no le cedió ni un suspiro. Pensando en todo lo sucedido, se dio cuenta que Leandro lo único que le causo era daño, nada más. Se dio también cuenta de que a él no le importaba ella, que todo era mentira hasta cuando le dijo de volver a irse y las noches posteriores.
Había sido una necia, tendría que haberle olvidado, no tendría que haber empezado nada.
Tenía que salir de ahí como fuese y recuperar lo que era suyo, salvar a Rober y acabar con Leandro.
Todo el amor que un día sintió por él se convirtió en rabia y era hora de hacerle pagar con creces todo lo que había hecho.
No sabia ni como, ni por donde escaparía pero tenía que ser antes de la boda de Leandro, antes de que Rober muriera.
Intento forzar la puerta pero no hubo éxito  ni tampoco el soborno al guardia, solo le quedaba la pequeña ventana, pero necesitaba una cuerda o algo para poder bajar por ahí. Así pues esperaría que el hechicero volviera a verla y con algún cuento le haría que le diera lo que necesitaba.

El hechicero estaba haciendo la pócima para Leandro, pero algo fallaba. Le faltaba algo y era extraño porque había seguido todos los pasos y echado todos los ingredientes...
El hechizo estaba principalmente compuesto por el sentimiento más fuerte del mundo: el amor. En este caso era de Joana hacia Leandro, por eso el no sospechaba nada porque pensaba que Amelia era Joana.
Pronto el hechicero se dio cuenta que todo era por Joana, que sus sentimientos hacia Leandro habían cambiado y por ello no funcionaba.
Fue a verla para comprobar si estaba en lo cierto o no, y la encontró en una esquina tirándose del pelo y cantando, parecía estar loca.
Se levanto y corrió hasta donde estaba el hechicero.

+Hola querida, ¿viniste a tomar el té? Siento que este todo tan desordenado es que los niños no paran.
-¿Joana?
+¿Si, Joana? Ay, perdona mi torpeza siéntate y ponte cómoda.
-¿Qué te sucede?
+Nada, si estoy mejor que bien. Niños a comer.
-No hay nadie más
+Si que los hay, son mis hijos con Rober,  aunque tu ya sabes la verdad jijiji.
-¿Cual verdad?
+Que son de Leandro pero jamás lo debe de saber Rober.
-Joana, ¿sientes algo aún por Leandro?
+Mmm, déjame pensar...no 
-Pero si os amabais 
+Ya pero...
-¿Qué?

Se volvió corriendo a la esquina, se sentó y comenzó a mecerse. Estaba totalmente ida.

-Quizás esa es la causa por la cual no funcionaba el brebaje, tengo que hacer algo.
+Tu, si tu, ven.
-¿Si?
+¿Me puedes dar una cuerda?
-¿Para que?
+Para trenzarla, es que...los niños me ponen nerviosa y eso me tranquiliza.
-Bueno, aquí la tendrás pero siempre alguien te estará controlando.
+Vale, ¿no te quedas para el té?
-No

Cuando salio el hechicero, a la princesa se le dibujo una sonrisa de oreja a oreja.

Una historia que contar...11

¿Desde cuando todo es lo que parece?
El hechicero jugo bien sus cartas y el único cabo suelto que tenía era Leandro, así pues hizo lo mejor que sabía: lo sumió en un profundo hechizo e hizo que se comprometiera con una joven, con Amelia.
Lusila para variar estaba tan celosa que quería hacer lo que fuese por parar la boda.
Una tarde escucho hablar al hechicero y a Amelia sobre lo que Amelia tenía que hacer...

-¿Lo has entendido todo?
+Si, pero...
-¿Qué? Tan difícil no es, solo tienes que seguir echándole unas gotas en el vino durante unos días más y ya.
+Pero luego volverá a ser el de antes y no recordara nada.
-Mira que eres torpe. Cuando eso suceda le contaremos toda la treta que he pensado pero todo después de su accidente.
+¿Pero y si cuando caiga se rompe el cuello?
-Pues uno menos querida.
+Pero ese no es el trato
-Nada es perfecto ni tampoco eterno.
+Algo podrás hacer.
-Solo intentar que no vaya tan rápido el caballo
+Si muere...
-Si muere te quedas viuda. 
+Pero yo no quiero eso.
-Bueno chica cuando aceptaste el trato te daba igual solo querías dinero y regodearte con la alta sociedad.
+Eso era antes
-¿Qué cambia ahora?
+Pues que es diferente a los demás.
-Paparruchas, solo te has enchochado con él y punto.
+Pero..
-Te callas

Lusila al ver que iban a irse salio corriendo. No sabía que hacer con tanta información y tampoco a quién acudir, pero claro, la dulce doncella no se podría ir de rositas. Cuando doblo la esquina estaba "Joana".

-No, no eso no esta bien. No se escucha detrás de las puertas y menos conversaciones ajenas.
+No yo no..

La agarro del cuello hasta estrangularla.

viernes, 9 de noviembre de 2012

Una historia que contar...10

El hechicero solo quería poder y no le importaba a quien tuviera que destruir y se se tenia que convertir en una princesa para poder enamorar a un príncipe, casarse con él, matarlo y ponerse en su lugar, lo haría.
La princesa ajena al verdadero plan del hechicero empezó a quedar a escondidas con Leandro. Aunque Sabían que estaba mal pues ella se casaba, pero eran tantas las ganas  que no se aguantaban. Llego el momento de la boda, solo unos días faltaban y el hechicero no llegaba, pero llego una carta y con ella una flor, pues eso es todo lo que recordaba Joana porque después de eso solo veía rejas.
Todo había sido obra del hechicero que en vez de matarla la había encerrado en una de las torres más altas de todo el castillo.
Cada intento de salir la dejaba más agotada: toda su vitalidad se escapaba. Lo único que la hizo mantenerse medio bien era el recuerdo de su amado.
Recordaba todos los momentos, una y otra vez. Pero había algo que la entristecía pues él se olvidaría de ella y ella encerrada estaría.
Cuando pensaba que no podría estar con él, no poder hablar y hablar durante horas, sus besos, sus caricias, el calor de su cuerpo... que todo eso le pertenecería a otra que no era ella, todo aquello la mataba por dentro.
Cada día que pasaba más débil se sentía. Uno de esos días el hechicero fue a verla:

-¿Cómo se encuentra ex-princesa? 
+Agotada
-No te preocupes pues pronto tu suplicio acabara
+¿Qué estas haciendo conmigo?
-Cobrarme la deuda aunque con intereses.
+Pero hicimos un trato...
-Oh si, ¿y? Sin querer se rompió y ahora me lo estoy cobrando.
+Me engañaste
-Si, cierto, pero al menos piensa que ahora todos viven felices y yo seré el futuro rey.
+Pero yo no soy feliz
-Ya, esa es la única pega pero bueno nada es perfecto.
+¿Y Leandro?
-Pues feliz como era de esperar. Conoció a una nueva amiguita, es muy bella e inteligente no como tu.
+¡Calla!Q

-¿Te duele la realidad?
+ Déjame sola
-Responde

+No, no me duele 
-Mentirosa, pero ya te dolerá cuando escuches las campanadas de la boda
+¿Se casar?
-Si, bueno te dejo que tengo que ayudarles con los preparativos. 

El hechicero salio por la puerta con una risa burlesca mientras Joana se le partía el alma. ¿Como le pudo haber echo eso? ¿Tan rápido la olvido? ¿Donde quedo lo de huir juntos?
La realidad hablaba por si misma, todo había acabado para ella, ya no le importaba morir...





It´s my Life


Una historia que contar...9

La princesa entro llorando en su habitación, pues el mundo se la estaba tragando. No quería casarse pues no le amaba pero tampoco podía negarse.
En esos instantes sería capaz de atarse a un clavo ardiendo...

+¿Quien anda ahí? 
-Soy ese clavo ardiendo al que tantas ganas tienes de agarrarte.
+¿Hechicero? 
-¿Si?
+¿Qué hacéis aquí? 
-Vine a cobrarme la deuda.
+Creí que ya lo habías hecho.
-No mi joven princesa, porque sabía que podrías ofrecerme algo más
+¿Algo más?
-Pues claro.
+¿Cómo el que?
-Tu vida.
+¿Mi vida? ¿ Queréis matarme?
-No, no, sino vivir tu vida y tenerlo todo.
+Pero, ¿que sería de mi?
-¿Tu? Podrías huir y vivir alejada de todo 
+¿Así sin más?
-Bueno...no podrías volver nunca.
+Pero mi familia y Leandro...
-Serán míos. Una vida por otra vida.
+No puedo aceptar el trato. Tiene que haber algo más que quieras
-El puesto de rey pero eso es difícil.
+No si yo te ayudo.
-¿ Traicionarías así a tu futuro marido?
+Es mi vida o la suya...
-Vale, acepto
+Bien, ¿qué tengo que hacer?

Pusieron en marcha un plan y ajustaron el trato: cuando el hechicero se convirtiera en Rober y este estuviera fuera de juego, se casaran pero cada uno podría vivir como quisiera con total libertad y jamás  podría saberlo nadie . Lo que nuestra querida Joana desconocida era que el hechicero tenía otros planes para ella pues aún seguía en pie la deuda, la cual tarde o temprano se la tendría que cobrar...

jueves, 1 de noviembre de 2012

Una historia que contar...8

En mitad de la celebración Sir Rober se llevo a parte a Leandro.

+Querido amigo mio que rápido te recuperaste ¿no? Y eso que decían que no sobrevivirías
-Eso es porque Joana fue a hablar con un hechicero
+ Mm interesante y ¿porque ella? 
-Es lógico, somos amigos
+Ya pero la amistad tienes unos limites ¿no? Se escapo contigo y tuvo la valentía de ir a un hechicero por tu cura y a saber que le pediría a cambio.
-Bueno eso es porque somos grandes amigos ¿es que dudáis Sir?
+No pero una doncella llamada Lusila no me dijo lo mismo, me contó otra cosa 
-¿Lusila? Por Dios Rober ¿como puedes creer a esa fulana de tres al cuarto?
+No, pero si algo sospechoso. Bueno sigamos con la fiesta de vuestro regreso y de tu recuperación. 

Rober se fue a seguir bebiendo y disfrutando de la fiesta pero sobre los hombros de Leandro una gran carga sobrecaía además todo lo que se avecinaba que no seria nada bueno.
Tenia que avisar a Joana sobre las sospechas de Rober y que corrían peligro ambos pero al ir en su busca se la encontró en los jardines, en los mismos en los que ocurrió todo pero no estaba sola con ella estaba Rober pero estaba de rodillas y con algo en las manos: le estaba pidiendo matrimonio.
Leandro se sentía confuso pero también herido, la confusión se debía a la pedida oficial de la mano de Joana y el sentirse herido era por ver que su princesa besaba otros labios que no eran los suyos. Esto ultimo no sabia exactamente el porque lo sentía pues  él no la quería o al menos eso quería hacerse creer a él mismo. Es cierto que estuvo con bastantes mujeres pero en todas ellas buscaba algo que solo una le dio, una única mujer que con una sola noche le hizo mella pero por siempre la cual recibía el nombre de Joana.
¿A quien intentaba seguir mintiendo? Intento olvidarla con otras hasta le hizo sufrir para que así se alejara de él pero ella volvía siempre.
Cuando vio que se quedo sola fue hacia ella, era como la primera vez que la vio: estaba llorando echa un ovillo.

-¿Qué te sucede?
+Leandro...
-¿Si?
+No deberíamos de haber vuelto, debería de seguir con la venda...
-Cuéntame que te pasa quitame esta angustia
+Rober me a pedido matrimonio 
-Lo se, lo vi. Pero eso ya sabias que sucedería 
+Pero no le amo, no quiero estar con él.
-Después de todo ¿aun..
+Si, no puedo remediarlo es algo tan fuerte pero que a la vez me duele tanto..
-No sabes cuanto lo siento no he parado de equivocarme desde esa noche y todo por intentar olvidarte.
+Leandro ya no creo tus palabras así que no las malgastes, lo único que me queda es asumir lo que me ha tocado, darle hijos y ser una futura, buena reina.
-Se que tengo la culpa pero... escapémonos. Te lo prometí ¿por que no cumplirlo? 
+Por que es tarde..

Y con una sonrisa triste y desgarradora se marcho dejando atrás a aquel caballero andante que le había robado hasta el ultimo de sus suspiros, que tanto dolor le causo. Se desprendió de lo ultimo que le quedaba y se abrió paso hacia el futuro pero las cosas tan fáciles no le iban a resultar pues todo trato con el diablo pasa su factura tarde o temprano...

Andy & Lucas ♥